¿Qué sabemos de la salud mental?

Por Carolina Martínez, asociada de Godoy Córdoba.

El 10 de octubre de 2024 se celebró el día mundial de la salud mental, lo que nos conlleva a resaltar la importancia del tema en el ámbito laboral, no solo porque se encuentra de moda después de la pandemia del COVID 19, sino porque al entenderlo es mucho más útil establecer estrategias para su cuidado.   

Es claro que, antes de la pandemia los trastornos mentales como la ansiedad, la depresión, el estrés y el insomnio ya existían en el ámbito laboral. Sin embargo, no eran observados con la atención que hoy se les dedica y esto se debe a que cada día son más los registros de trastornos mentales, lo que hace necesaria su intervención desde la prevención y la atención. 

De esta forma, la salud mental se ha convertido en un tema que busca espacio en la agenda no solo en Colombia, sino en el mundo en general, donde enfrenta dos constantes que limitan una correcta intervención. En primer lugar, la falta de políticas públicas que permitan su intervención de manera integral, y, en segundo lugar, la percepción de que es un tema tabú sobre el cual la población prefiere no tratar. Recordemos que, no mucho tiempo atrás, acudir a un psicólogo o a un psiquiatra era un hecho mal visto por la sociedad. 

En este sentido, ¿Cómo podemos cambiar la perspectiva con la que se aborda el tema por parte de la sociedad? Para nosotros, la respuesta es la educación y con ello empezar a entender qué es la salud mental, cuál es su importancia, cuáles son los trastornos que se pueden presentar en la clase trabajadora, qué los causa y qué debemos hacer para intervenir. Una vez se tenga este panorama se puede trascender el estigma que existe sobre el tema y abordarlo desde la validación y la empatía, lo cual en efecto repercutirá en personas más sanas y felices, así como empresas productivas y sostenibles. Lo anterior es importante porque, como se sabe, el bien más valioso de una empresa es su fuerza trabajadora. 

Así las cosas, lo primero que debemos entender es qué es la salud mental. Para esto, acudiremos a la definición que ha establecido la Organización Mundial de la Salud (OMS):  

 “Un estado de bienestar en el cual el individuo es consciente de sus propias capacidades puede afrontar las tensiones normales de la vida, trabajar de forma productiva y fructífera y es capaz de hacer una contribución a su comunidad”.  

De esta forma, y en términos sencillos, la salud mental es un estado de bienestar que permite al individuo desarrollarse en todos los aspectos y de manera dignificante tanto para él como para la sociedad. Por lo tanto, la salud mental es un factor determinante que los empleadores deben cuidar en relación con su equipo de trabajo, ya que, de verse afectada, impacta negativamente su ambiente laboral y su productividad. Así mismo, el trabajador, su familia y su entorno puede verse alterado, generando así repercusiones indeseadas. 

 

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Precisado lo anterior, la salud mental puede verse afectada por los diferentes trastornos mentales, como los mencionados en este artículo, los cuales suelen ser causados en el ámbito laboral debido a los siguientes factores:   

  • Falta de claridad de las funciones y responsabilidades en el cargo.  
  • Insuficiencia de capacidades y preparación para el cargo a desempeñar. 
  • Trabajo excesivo de acuerdo con el rol y el personal. 
  • Turnos de trabajo u horarios de trabajo que no permiten el descanso real del trabajador. 
  • Condiciones de trabajo inseguras o deficientes. 
  • Falta de capacitación. 
  • Cultura organizacional que promueve actos inseguros.  
  • Exceso de supervisión de las tareas y deficiente trabajo en equipo. 
  • Situaciones de acoso laboral. 
  • Abstención de reconocimiento al mérito. 
  • Inadecuada remuneración en relación con el trabajo, experiencia y formación del trabajador. 

De esta forma, lo primero que se debe hacer es entender nuestro entorno laboral y evitar que esta clase factores se encuentren presentes y así controlarlos de manera adecuada entendiendo que, lo más importante es revisar cómo están los trabajadores en materia de riesgo psicosocial, para así ejecutar un plan de intervención adecuado para que el individuo se encuentre preparado para asumir y superar los retos laborales que su vida profesional conlleva.   

Para tener un panorama general del estado del riesgo psicosocial en Colombia se ha previsto la batería de riesgo psicosocial, la cual es un insumo de vital importancia y de obligatoria aplicación. En cuanto a las formas de intervención son amplísimas desde la formación técnica hasta aspectos de formación en habilidades blandas, las cuales sin lugar a duda son igual o incluso más importantes que las técnicas ya que a partir de estas es posible desarrollar talento.   

De igual forma, los casos en los que ya se reporte un trastorno es importante intervenirlos con un profesional de la salud, ya sea con un psicólogo o un psiquiatra quien podrá a través de la terapia e incluso la medicina, buscar las vías para restablecer la salud mental. Al respecto, es evidente que no hay nada de malo en acudir a estos profesionales, al contrario, cada uno de ellos aporta significativamente para tener un mejor bienestar.   

Así las cosas, en conclusión, la salud mental resulta ser un tema más familiar para cada uno de nosotros, en el cual todos tenemos un aporte importante que realizar. De este modo, el tema deja de ser un tabú y, por el contrario, se convierte en un factor de crecimiento, frente al cual existe un interés genuino y una empatía al no resultarnos ajeno. 

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